Aprevechando los festivos de Semana Santa me han llevado por sorpresa a Venecia. Aunque inicialmete la sorpresa ha sido dura de digerir, lo cierto es que la escapada ha sido preciosa.
Venecia se divide en diferentes barrios: San Marco, Castello, Cannaregio, Santa Croce, San Polo y Dorsoduro. Nos hemos hospedado en el barrio de San Marco, el epicento, para poder patear la ciudad, en el Hotel Campiello, que por su situación ha sido un acierto.
Es dificil establecer que es lo imprescindible que hay que ver en Venecia, pero lo intentaré.
1. Plaza de San Marco, y en esta, el Palacio Ducal, la Basílica de San Marco , Campanario de San Marco y la Biblioteca Nacional Marcina.
2. Puente de Rialto y Puente de los Suspiros.
3. El Gueto Judio. Ubicado en el barrio de Cannaregio, en este podrás callejear visitando la puerta de entrada al gueto viejo, la puerta de entrada el gueto nuevo, y la plaza (campo) de este último. Una muy buena opción sería comer en un restaurante kosher.
4. El Gran Canal. Este divide la isla en dos, un paseo por el mismo merece la pena.
5. Islas de Murano, Burano y Torcello. Aprovecha un día y dedícalo por completo a recorrer otras islas, estas tres es un básico. Murano por su fábricas de cristal, y sus respectivas tiendas; Burano por sus casas de colores, cuyo objetivo era orientar a los pescadores en la niebla; Torcello y su Puente del Diblo, conocida por ser el primer asentamiento veneciano. Esta escapada podrás realizarla usando un bono para los vaporetos válido por 24 horas.
6. Paseo en góndola. El mayor de los tópicos es el paso en gondola, que aunque breve te acerca a esas fachadas sumergidas en los canales, su precio es de 90 € si es diurna y 110 € si es noctura. Una vez en la góndola, tu gondoleró te podría ofertar incrementar estos 30 minutos hasta 45, pon un precio total de 150 €.
7. Otros puntos de interés son la Libreria Acqua Alta, famosa por su góndola en el interior del establecimiento, remedio para salvar sus libros en las inundaciones, las manos del escultor Lorenzo Quinn, que yo no he podido ver en el Hotel Ca S'agredo, pero sí junto al Arsenal de Venecia, la obra Building Bridges.
Si el Gran Canal es la arteria principal de Venecia, dos de su calles tienen cierto interés, la Via Giuseppe Garibaldi, por sus bares y restaurantes y la Mercerie, desde el Puente Rialto a la la Piazza de San Marco, por sus comercios.
Entre su gastrononía destaca: cicchetti, típicas tapas venecianas, acompañadas con Aperol, Campari, Bellini o similar, o bien de su típico vino Prosciutto; pastas o arroces con nero di seppia, es decir con tinta de calamar; baccala mantecato, que te recordará a la brandada de bacalao portuguesa; fritto misto, es decir, marisco frito; o fegato alla venezina, o lo que es lo mismo higado encebollado.
Lo mejor de Venecia, perderse por su callejones caminando, recorrerla de arriba abajo te descubrirá muchos puentes, plazas, iglesias y puntos de interés, lo peor, ordas o legiones de turista como tú en todos los lugares.
Mil gracias, os quiero a los tres.
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