Tratttoria proviene de trattore, que significa preparar, lo que nos induce
a pensar que se trata de un restaurante de cocina casera y tradicional italiana. Esto es lo que
te encontrarás en el local del que te contamos nuestra experiencia hoy.
Tras nuestro viaje a Cerdeña nos hablaron de un restaurante fiel a la cocina
tradicional italiana, ubicado junto a nuestro querido barrio de
Malasaña, y allí hemos ido, cena para dos sin niños.
Nosotros en nuestra primera visita hemos podido constatar que la cocina
italiana no es tan solo pasta y pizza. Nos decidimos por burrata pugliese y capresse
di búfala, para con ello probar los dos quesos de los que presumen, burrata y
mozarella. Lo cierto es que ambos son suaves y deliciosos. El gran descubrimiento estuvo en el acompañante de la burrata, caponata siciliana. Se trata de un estofado frío de berenjenas y tomates, excelente.
Para los segundos, pollo alla cacciatora y risotto ai porcini al tartufo, donde éste último entra de un modo sorprendente por el olfato desde que el plato se acerca a tu mesa.
Todo ello lo acompañamos de una botella de vino blanco italiano, del que su
ficha destacaba ser biológico y afrutado, Munir Catarratto.
Y como no podía ser de otra manera, había que poner la guinda con un auténtico
Tiramisú, donde el mascarpone sorprende por su sabor. Punto y final con una frasca del típico limoncello, invitación de la casa.
En definitiva, un auténtico italiano, basado en cocina casera, de imagen algo clásica, pero que hará las delicias de los amantes de esta gastronomía.
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